En la Ciudad de México, el legado es una figura jurídica que se refiere a la disposición testamentaria que realiza una persona sobre un bien o un derecho a favor de una persona en específico, a la que se le conoce como legatario. En el Código Civil de la Ciudad de México, en su artículo 1290, se establece que el legatario adquiere el derecho al legado puro y simple, así como al de día cierto, desde el momento de la muerte del testador.
Es importante destacar que el legado puro y simple es aquel en el que el testador deja una cosa o un derecho determinado al legatario, mientras que el legado de día cierto es aquel en el que el testador establece la entrega de la cosa en una fecha determinada.
De acuerdo con lo establecido en el artículo 1290, el legatario adquiere el derecho al legado desde el momento de la muerte del testador, lo que significa que su derecho no está sujeto a ninguna condición o plazo adicional. Esto es importante porque permite que el legatario pueda disponer de ese derecho desde el momento en que se le concede, siempre y cuando se cumplan las condiciones establecidas en el testamento.
Es importante mencionar que en algunos casos, el legado puede ser objeto de controversia entre los herederos y los legatarios, especialmente si el legado es muy valioso o si el testamento no es claro en cuanto a las condiciones para su entrega. En estos casos, es recomendable buscar asesoría legal para determinar los derechos y obligaciones de cada parte involucrada.
En conclusión, el legado es una figura jurídica importante en el derecho sucesorio, y en la Ciudad de México, el legatario adquiere el derecho al legado desde el momento de la muerte del testador, lo que le permite disponer de ese derecho sin restricciones adicionales. Si tienes alguna duda o necesitas asesoría personalizada, no dudes en contactarnos para agendar una consulta gratuita con nuestros abogados expertos. Estamos a tu disposición para ayudarte a tomar las mejores decisiones para tu patrimonio.
